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Ludopatía en adolescentes. Síntomas, causas y consecuencias.

    Ludopatía en adolescentes

    ¿Qué es la ludopatía?

    La ludopatía en adolescentes es una auténtica plaga de nuestra sociedad. Pero, ¿qué es la ludopatía? La ludopatía es la incapacidad de un sujeto para poner fin a la práctica de los juegos de azar o de las apuestas, a pesar de conocer las consecuencias negativas, que su actividad implica. También, podemos referirnos a la ludopatía como juego patológico.

    La aparición de internet ha supuesto una gran revolución, que ha cambiado el perfil de los actuales jugadores patológicos. La imagen que todos tenemos del jugador volcado sobre el tapete verde del póker o pendiente del giro de la ruleta se va difuminando. Ahora, a través de internet, el juego patológico llega a nuestros adolescentes, cada vez con más facilidad.

    La ludopatía en adolescentes: La plaga del siglo XXI.

    El crecimiento de la ludopatía entre nuestros jóvenes es exponencial. Es muy difícil conocer con exactitud la magnitud del problema del juego patológico en los adolescentes. La ley prohíbe a los menores entrar en los locales de apuestas, por lo que es complicado obtener estadísticas fiables.

    Por otra parte, las apuestas on-line o juegos como el póker por internet están sustituyendo, cada vez más a las tradicionales máquinas tragaperras. Los jóvenes están muy familiarizados con las nuevas tecnologías y son presas fáciles de los casinos o de las casas de apuestas on-line.

    Los últimos estudios confirman que los casos de ludopatía en adolescentes duplican ya en número de casos la prevalencia del juego patológico en los adultos.

    No podemos permanecer indiferente ante las cifras de los más recientes estudios epidemiológicos publicados. Especialmente preocupante, es el dato de que España es el país europeo con más casos de jóvenes adictos al juego. En el rango de edad de los 15 a los 22 años los españoles ludópatas superan a todos nuestros vecinos europeos.

    Los casinos, las máquinas tragaperras, los bingos, las apuestas y loterías oficiales están dando paso a un nuevo de tipo de juegos y apuestas adictivas, dónde los adolescentes son las principales víctimas.

    La proliferación de locales de apuestas en los barrios más pobres de las grandes ciudades, las apuestas por internet o juegos como el póker on-line son ahora los principales reclamos para esos adolescentes que no se separan ni un minuto de sus móviles.

    España es el país de Europa con más ludópatas adolescentes
    (1) – España es el país de Europa con más ludópatas adolescentes

    El juego en la infancia.

    Jugar es parte del aprendizaje. En la actualidad no se concibe enseñar una disciplina o una asignatura sin intercalar el juego en medio de los conceptos. Esto se explica porque es precisamente a través del juego que se aprenden y se retienen los conceptos con mayor efectividad y se logra una mayor permanencia.

    Por otra parte, el juego ayuda al niño y al adolescente a respetar reglas, trabajar en equipo y superar nuestras competencias. Gracias al juego, se desarrollan habilidades sociales, se detona el desarrollo físico y se llega a la madurez psicológica.

    ¿Cómo se llega a la ludopatía adolescente?

    Como hemos dicho anteriormente, es sano crecer en un contexto de juegos. No obstante, al llegar a la adolescencia, elementos como el azar o la apuesta entran en escena y convierten lo que surgió como un pasatiempo satisfactorio y necesario, en un juego patológico.

    Existen dos factores propios de cierto tipo de juegos que pueden desembocar en una ludopatía:

    • El azar.
    • La apuesta.

    Ambos están estrechamente relacionados y llevan a la persona a intentar cambiar su futuro a través de un golpe de suerte.

    A nivel psicológico, el joven que participa en juegos de azar, alberga la esperanza de darle un giro drástico y positivo a su destino. Busca sentirse elegido por la suerte y cambiar el curso de su vida.

    Ahora bien, lo que cabe preguntarse es: ¿Por qué querría ese joven producir un viraje tal a su vida, como para llegar al punto de tentar a la suerte y arriesgar dinero que, en caso de perder, no volverá a recuperar?

    Juegos adictivos.

    Asimismo, el juego que cuenta con un factor adictivo es aquel que premia una determinada conducta repetida. Esto genera una creciente expectativa en la persona, ya que generalmente el premio es anunciado por luces o por una música motivadora producida por la máquina.

    En muchas ocasiones los adolescentes usan el tiempo de recreo o faltan a clase para practicar el juego patológico. Si a la emoción del juego le sumamos el dejar de hacer tareas poco agradables como el estudio y le añadimos la degustación de golosinas o de alcohol, el juego pasa a convertirse en una necesidad.

    Estos factores, como la interrupción de las clases, el uso clandestino de locales dónde por su edad no pueden entrar, el consumo de golosinas o de alcohol potencian la adicción de esta clase de apuestas o juegos.

    Ante la magnitud de las cifras estadísticas sobre la ludopatía en adolescentes, debemos pasar a considerar los factores que llevan a desarrollar la compulsión por el juego.

    Factores que llevan a la ludopatía en adolescentes.

    ¿Por qué existen personas que caen de forma abismal en el juego patológico? ¿Por qué otros adolescentes ven pasar esta adicción frente a sus ojos y no sienten la más mínima tentación de probar los juegos de azar, las apuestas o las máquinas  tragaperras?

    El número de casas de apuestas no deja de crecer
    (2) – El número de casas de apuestas deportivas no deja de crecer.

    Esto se debe a que existen factores, tanto internos como externos, que contribuyen a que la ludopatía se geste y encuentre un terreno fértil para desarrollarse.

    Es común ver que, dentro de una familia disfuncional, uno de los hijos desarrolle adicción al juego, mientras que el otro sabe convertir su ocio en un tiempo productivo. Esto se debe a que quien desarrolla la ludopatía, presenta unos factores de riesgo inherentes a la personalidad, mientras que el otro no los tiene.

    A continuación, citamos una serie de factores o circunstancias que pueden influir en la aparición de la ludopatía. Recalcamos que la ludopatía en la adolescencia es un trastorno multicausal y no es sólo uno de estos factores el desencadenante, sino la suma o coincidencia de varios de ellos.

    • Personalidad conflictiva.
    • Falta de recursos.
    • Genética o costumbre adquirida.
    • Familias disfuncionales.
    • Problemas sociales.
    • Falta de asertividad.
    • Problemas de comunicación familiar.
    • Escasas habilidades sociales.

    Padres con ludopatía.

    Los hijos de padres jugadores tienen un riesgo mucho mayor de transformarse en ludópatas que aquellos que nacieron de personas no jugadoras. Esto se debe a que tanto los factores genéticos como la repetición de un hábito al lado del cual crecieron, pueden llevarlo a reiterar esta conducta insana.

    Ambiente familiar.

    El entorno familiar y social es decisivo cuando el joven tiene propensión a conductas compulsivas o que le permitan evadirse de la realidad. Si en el hogar se practica el juego de forma indiscriminada e ilimitada, esto puede ser el detonante para iniciar el camino hacia la ludopatía.

    Mal enfoque educativo del juego en los colegios.

    Otro factor que afecta es el excesivo juego en las escuelas. Para mantener a los niños calmados, la política de algunas escuelas suele ser la de permitir que los niños que terminan el trabajo antes, puedan salir a jugar.

    Esto hace que muchos alumnos hagan un trabajo descuidado y de mala calidad debido al deseo de terminar las clases lo antes posible. Como si esto fuera poco, se asocia al juego con una recompensa en vez de con lo que debería ser: una actividad para compartir entre todos. Todo esto hace que, los niños que terminan últimos de todos porque se esmeraron en hacer su tarea de forma correcta, se sientan castigados con la no posibilidad de jugar.

    De esta manera, se está distorsionando la imagen del juego, con lo que se planta la semilla de la ludopatía para que las personalidades fértiles la hagan florecer al llegar a los difíciles años de la adolescencia.

    Problemas sociales y psicológicos.

    Los problemas sociales o psicológicos, ya sean circunstanciales o permanentes, pueden hacer ver al juego como una vía de escape que no se logra hallar por otro lado. Un joven que tenga dificultades para interactuar con sus padres, encontrará en el juego la satisfacción que no puede obtener de los vínculos sociales.

    Estos problemas llevan a que el juego sea la única vía de escape a una realidad que no se quiere afrontar, al tiempo que refirman su posición de adolescentes frente al adulto que lidera el hogar.

    Las apuestas online son una forma de escapar de la realidad
    (3) – Las apuestas online son una forma de escapar de la realidad

    Factores específicos actuales.

    A su vez, existen factores específicos de nuestros tiempos que desembocan en la ludopatía:

    • Conexión las veinticuatro horas del día a internet.
    • Carencia de filtros en los contenidos para menores.
    • Falta de límites por parte de los progenitores.
    • Nomofobia o dependencia patológica del teléfono móvil.
    • Ocio excesivo.

    La ludopatía en la adolescencia emerge como resultado de conductas y carencias vividas en la infancia. Si de niño estaba acostumbrado a permanecer conectado y vinculado a la pantalla dentro y fuera de casa, de joven esta conducta se arraiga.

    La falta de límites por parte de los padres, es un factor problema, ya que el joven que no aprendió a encontrar el momento preciso de poner fin a una actividad placentera como es el juego, hallará muy difícil autolimitarse.

    A su vez, la nomofobia (la angustia a dejar el hogar sin llevar el móvil) lleva a que el teléfono proporcione alternativas de diversión que pueden derivar en una ludopatía fuera de la pantalla.

    El ocio debe formar parte de la vida de todo niño y adolescente. De él salen muchas ideas creativas, por lo que es considerado necesario para el desarrollo cognitivo de la persona. Sin embargo, cuando este se transforma en la única “actividad” a desarrollar aparte de los estudios, lleva al joven a caminar al borde del precipicio que conduce a la adicción, entre las cuales se encuentra la ludopatía.

    Las estadísticas no son muy alentadoras cuando nos enfrentamos a una realidad que nos dice que un 40% de los adolescentes entraron en contacto con los juegos de azar a través de su móvil.

    Cómo diagnosticar la ludopatía en adolescentes.

    Los siguientes son síntomas que pueden indicar una ludopatía. Por lo general, no se presentan todos ellos, y la existencia de solamente uno, no sería motivo de alarma. Para pensar que nuestro hijo ha caído en la ludopatía, es necesario que manifieste al menos tres síntomas de los que se detallan a continuación:

    Mentiras.

    Las mentiras suelen ir asociadas con el mundo del juego. Una de ellas puede ser que dice no estar yendo al lugar de apuestas, pero que en realidad sí lo haga. Por otro lado, es posible que mienta con respecto a la cantidad del dinero qué apuesta. Intenta minimizar el importe del dinero gastado, pero acaba resultando evidente que es mucho mayor.

    Evasión.

    Si el juego se convierte en una forma de evadir los problemas familiares, escolares o sociales, puede tratarse de una ludopatía. Mediante el juego, el adolescente, busca una satisfacción que no logra en los vínculos que deberían garantizársela.

    Imposibilidad de detenerse.

    El joven intenta dejar de jugar y hace lo posible por no volver al lugar de juego. Sin embargo, no lo logra y termina frecuentando estos sitios de forma compulsiva. No puede detenerse y esto le genera irritabilidad.

    El póker online ha llevado a muchos adolescentes a la ludopatía
    (4) – El póker online ha llevado a muchos adolescentes a la ludopatía.

    Angustia.

    El juego genera al adolescente preocupación y angustia. Puede ser por experiencias vividas en las cuales perdió bastante dinero. También la angustia puede ser de tipo anticipatorio con temor respecto a las futuras consecuencias de su actividad.

    Necesidad de revancha.

    El hecho de haber perdido dinero, hace despertar en él la necesidad de jugar más, para recuperar lo que perdió. Esta es una de las señales más claras de ludopatía, ya que intenta igualar su dinero mediante el mismo juego que se lo hizo perder. Cuando se llega a esta etapa, queda claro que el dinero que apostó, y que perdió, es más del que debería haber apostado. Por ello se genera en él la necesidad de volver a intentar la recuperación del dinero.

    Arriesga relaciones importantes.

    La necesidad de jugar está por encima de sus vínculos familiares, sociales e institucionales. El mayor goce que experimenta es a través del juego. Podemos asegurar que estamos ante un serio problema, cuando como consecuencia del juego patológico:

    • Se arriesga a la expulsión del centro de estudios.
    • Recibe un ultimátum de parte de una amistad o de su pareja.
    • Se expone a un severo castigo en el hogar.

    Petición de dinero.

    Ante las sucesivas pérdidas económicas, el pudor y la vergüenza desaparecen para dar paso a una osadía inusual en el adolescente. Agobiado por las deudas, el joven pedirá dinero a otros miembros de la familia que no vivan con él e incluso a vecinos. Si le falta dinero para jugar, lo conseguirá como sea, incluso diciendo que necesita el dinero para otros propósitos. Otra característica que ocurre en estos casos, es que el joven planifica apostar una cierta cantidad de dinero, pero termina apostando mucho más de lo que inicialmente tenía pensado.

    Violación de la confianza.

    Ocurre esto cuando el adolescente traiciona la confianza de su familia. Toma dinero de sus padres, de sus hermanos o de cualquier otro miembro de la familia. Por supuesto que lo hace sin pedir permiso. En caso de ser descubierto, es capaz de negar haberlo hecho.

    ¿Cómo se pasa de ser jugador sano a ludópata?

    Si bien es posible que una persona nazca o crezca con la propensión a desarrollar ludopatía, lo cierto es que nadie nace siendo jugador patológico. Tampoco, la ludopatía es una patología que tenga una génesis espontánea. La ludopatía cuenta con una serie de etapas previas, las cuales se encaminan de forma paulatina hacia el problema final:

    Fase de ganancias.

    Todo ludópata tiene sus inicios en una etapa en la cual todo son ganancias. Un éxito sucede a otro, noche tras noche. Esto lleva al joven a creer que es especial y que posee habilidades únicas para el juego. Durante esta fase, el adolescente cree que tendrá la posibilidad de cambiar su vida gracias al juego.

    Entusiasmado, puede llegar incluso a pensar que tendrá la posibilidad de sustituir el trabajo por las apuestas. Esta primera etapa es decisiva para la generación de las posteriores, ya que su impacto es tan fuerte, que el joven se niega a creer que solamente se trató de una racha de buena suerte. Es precisamente su desesperado intento por volver a esta etapa lo que dará inicio a la enfermedad.

    La fase de ganancias es el comienzo de la ludopatía en adolescentes
    (5) – La fase de ganancias es el comienzo de la ludopatía en adolescentes

    Fase de pérdida.

    Esta fase comienza cuando el éxito ya no está del lado del jugador. Esto sucede por la propia ley del azar: no es posible ganar la totalidad de las veces. El problema es que, ante cada pérdida, el jugador genera la cantidad de apuestas necesarias para recuperar el dinero perdido. En esta dinámica, se suscitan cada vez más pérdidas. Es en este momento cuando la familia y los amigos del adolescente se convierten en un estorbo. Es por culpa de ellos que no puede dedicarse al juego de forma plena.

    Fase de desesperación.

    En esta etapa, se genera la desesperación por conseguir el dinero que le permita pagar las deudas. La ansiedad y la angustia es tal que, si no consigue el dinero por sus propios medios y nadie se lo presta, lo más probable es que lo robe.

    Fase de agotamiento.

    Esta es la etapa más peligrosa de todas, ya que el joven sabe que perderá, pero eso no lo refrena de jugar. Por lo tanto, es cuando empieza a evaluar un posible suicidio.

    Tratamiento de la ludopatía en adolescentes.

    La ludopatía en la adolescencia, como todas las adicciones y enfermedades, tiene cura. Lo primero que se necesita es que el adolescente desee curarse. El paso previo es reconocer su adicción al juego. Esto tan simple, resulta muy complicado, pues el adolescente ludópata, como el paciente alcohólico no suele reconocer su adicción.

    Las escusas son innumerables para justificar su conducta: “Es solo un entretenimiento”. “Lo tengo todo controlado”. “Esto lo dejo cuando yo quiera”. Sin la aceptación del trastorno es muy difícil la recuperación del joven. El caso más frecuente es que acuda a consulta, tras innumerables pérdidas económicas, presionado por la familia. Si esta presión familiar no va acompañada de un reconocimiento explícito y un sincero deseo de abandonar el juego, la terapia está condenada al fracaso.

    Una vez en terapia, es importante estudiar los trastornos asociados, pues de todos es conocida la frecuente asociación de la ludopatía con otros trastornos psicológicos. En algunos casos, debido a la intensidad de la ansiedad o a fuertes componentes depresivos, que pueden incluir la ideación autolítica, es conveniente valorar si el paciente precisa algún tipo de medicación que le ayude en esta fase inicial.

    Una herramienta auxiliar que nos puede ser de utilidad es el cuestionario S.O.G.S. acrónimo de South Oaks Gambling Screen. Fue diseñado en 1987 por Blume y Lesieur, y aunque su principal utilización está en el campo de la detección precoz, cada vez se usa más como un test para valorar la gravedad de la ludopatía.

    Una vez se ha conseguido que el paciente deje de apostar, al menos temporalmente, podemos indagar en las emociones y necesidades más profundas que le han llevado a adoptar ese comportamiento. El paciente debe ser capaz de comprender las carencias emocionales que le han empujado al juego y ser capaz junto a su terapeuta de buscar alternativas saludables.

    La prevención de las recaídas debe jugar un papel fundamental en la terapia. Para ello, es fundamental que el adolescente traté de acercarse a los lugares de riesgo. En ocasiones, es muy útil recurrir a los grupos de apoyo para complementar la psicoterapia, pero nunca para sustituirla.

    Durante el tratamiento el adolescente debe evitar los lugares de riesgo
    (6) – Durante el tratamiento el adolescente debe evitar los lugares de riesgo.

    Referencias bibliográficas.

    • Asociación para la rehabilitación de jugadores patológicos y otras adicciones. Enlace.
    • Perfiles de jugadores patológicos en la adolescencia – Sarabia, I. y col. Enlace.
    • Ludopatía: Un enemigo silencioso que crece sin control. TVN Noticias. Enlace.
    • El Juego Patológico – Jesús Castro. Enlace.

     

    Galería de imágenes.

     

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